miércoles, 23 de noviembre de 2016

La Maliciosa por la Cuerda de los Porrones y descenso por Las Chorreras del rio Manzanares. Otoño en Guadarrama.


En las postrimerías del otoño elijo un itinerario que permita deambular por naturaleza agreste y solitaria y que, a la par, cuente con los brillantes colores de la estación que se acaba.

En síntesis, el circuito es el siguiente:

Inicio en el Collado de Quebrantaherraduras (1.080m, portal de acceso a la Pedriza); sigue luego el trazado de la Cuerda de los Porrones hasta el Collado de las Vacas (1.888m); ascenso a la cumbre de la Maliciosa (2.227m); retorno al Collado de las Vacas desde donde desciende hasta el río Manzanares llegando al Puente de los Manchegos (1.750m). A partir de éste el recorrido sigue paralelo a la margen izquierda del Manzanares para desembocar en la pista que comunica con la Charca Verde, retornando al punto de partida tras pasar por Canto Cochino.

Son las 9h de una mañana fría cuando comienzo el trote en el Collado de Quebrantaherraduras. El cielo azul tiene algún vestigio de nubes que anuncian cambio al cabo de algunas horas.

El Yelmo de la Pedriza
Voy adentrándome en el bosque de coníferas por un sendero de suave pendiente (PR 16, marcas amarillas y blancas). El camino, un centenar de metros por debajo del filo de la Cuerda de los Porrones, en su tendido Este – Oeste, va empinándose. El frio espolea la marcha. Salgo del resguardo de los árboles y veo que la neblina va tomando cuerpo, aunque todavía es difusa.

El sendero sale del bosque a la altura de los últimos Porrones
Enfrente ya se ve la Maliciosa Alta
Alcanzo el roquedo que hay al pie de la Maliciosa Baja. Por delante unos doscientos metros de cuesta algo exigente que, afortunadamente, se encuentra parcialmente protegida de las ráfagas de viento. La visión de la cima de la Maliciosa (Alta) me induce a seguir, “todavía está libre de niebla”.

Desde fuera del bosque se divisa el embalse de Santillana y, a lo lejos, el monte de San Pedro
Tras el roquedo, la Maliciosa
En medio de una fuerte ventolera alcanzo el Collado de las Vacas (1.888m). La pala somital Este de la Maliciosa Alta, que se eleva 300m desde aquí hasta la cima, se presenta fácil. Al poco de comenzar la subida unas cabras captan mi atención; mientras tanto la bruma continúa aposentándose.

 
Sin apenas darme cuenta, de lo poco que se ve, alcanzo la cima de la Maliciosa (2.227m) y me resguardo al pie de su vértice geodésico. Llega gente, no mucha, desde el collado del Piornal. Espero, en vano, que al menos durante algunos segundos las nubes dejen ver el paisaje.

Sin visión y con mucho frío nada me retiene aquí arriba, y sí me apremia abandonar el pico para dirigirme a cotas inferiores, más protegidas, en pos del tramo “otoñal” del recorrido.

Desciendo rápido de nuevo al Collado de las Vacas (curioso nombre para un lugar en el nunca he visto otro rumiante distinto de las cabras) y busco la trocha que, piorno a través, lleva hasta el lecho del río Manzanares, unos 150m más abajo. Algunos hitos van indicando la senda entre los altos piornos.

Descenso entre los piornos
Al fondo, la Pedriza
Llego junto al cauce ¡El Manzanares baja crecido de verdad! Mucho caudal y rocas superficiales mojadas así que, sin dudarlo, me meto directamente en el agua (cubre hasta la rodilla) y vadeo el río sin pensar siquiera en descalzarme, que la seguridad es lo primero; además, ya se secarán las zapatillas durante el resto de la marcha ¡Es lo que tienen las “trail running shoes”, tal como entra el agua, después sale!

¡Hay que cruzar el río Manzanares!
Alcanzo el Puente de los Manchegos, lugar donde las “zetas de la Pedriza” hacen un giro de 360º y vuelven hacia su origen, discurriendo al pie de la Sierra del Francés.

A unos 100m del puente, sin haberlo cruzado, comienza el sendero que discurre por la orilla izquierda del Manzanares. Vegetación natural y apretada; pendiente trocha que discurre por solitario entorno.

Atrás queda el pico de la Maliciosa Alta, con su pala, y las nubes parece que ahora ofrecen más claros.

Al fondo, la cima de la Maliciosa
Comienzo la bajada internándome en un barranco cada vez más profundo. Los pinos autóctonos, helechos y brezos predominan al principio.
 
El río se desploma a saltos, el caudal es cada vez más agitado y tumultuoso. El Manzanares continúa su impetuoso discurrir por la garganta.

Las tonalidades del otoño “iluminan” el recorrido.

El estrecho sendero a tramos se convierte en arroyo; resulta primitivo y bello.
¿Tronco fosilizado, roca lignificada, o ambos?
El estruendo del agua aumenta considerablemente. Me acerco a contemplar las Chorreras del Manzanares. Comienza a lloviznar ligeramente.

 
Chorreras del río Manzanares
Ya va quedando menos. Continúo ahora por un bosque de arizónicas tras el cual el barranco se abre y tornan a aparecer los robles.
 
El otoño confiere un precioso toque impresionista al rincón en el que se encuentra el Puente del Retén ¡Por el que  se puede cruzar el Manzanares sin mojarse!

 
Bayas de Mostajo (Sorbus aria)
Puente del Retén
Continúo la marcha al otro lado, por una buena senda, dejando atrás, bajo la llovizna que no cesa, el colorido, el silencioso pinar y el barranco, lugares que dentro de poco serán cubiertos por la nieve y el hielo.
 
 
En pocos metros más alcanzo los escalones de piedra que me dejan en la pista que lleva hasta la Charca Verde.
Acelero el trote mientras, por la izquierda, voy observando alguna de las rocas singulares de la Pedriza del Manzanares. Tras pasar por Canto Cochino tomo una senda paralela a la carretera que me conduce de nuevo hasta el Collado de Quebrantaherraduras.

Son las 15h cuando llego al coche, tras haber realizado un circuito de casi 20km, salvando un  desnivel acumulado de 1.330 de D+, en un día en el que constato cómo los colores del otoño van llegando a su fin.

12 comentarios:

  1. Bonita ruta con baño forzado incluido, me imagino que algua estaría "del tiempo". La estación otoñal está dando sus últimos coletazos y ya ha dado paso al invierno y por lo que veo has podido disfrutar más del otoño que yo. La primera foto es magnífica!!!!!!!!!!.
    Salud(os),

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    1. El otoño, cuando llega se ve y cuando se va, se siente. El agua sí, estaba tal cual se intuye en la foto.
      Salud y Montaña

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  2. La verdad es que pasar el río y mojarse las zapatillas puede parecer una locura pero, cuando piensas en quitártelas y pasar descalzo también tiene su punto de duda. Así que, no puedo precisar cuál de las dos opciones es peor puesto que ambas tienen miga.
    Bravo por las cabras, por el tronco muerto y convertido en arte de la naturaleza, y también, por la expresión captada del otoño con tu cámara.

    Un abrazo

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    1. En montaña, en mi opinión, la seguridad prima sobre otras cosas, así que, sin ser deseables ninguna de las opciones para vadear, la "menos" mala es la de dejarse las zapatillas puestas. Después, si no paras, los pies van calientes.
      Gracias por tus opiniones, Javier.
      Salud y Montaña.

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  3. Carmar el encantador de cabras!!!, si es que posan para ti, mostrando su mejor perfil. Yo creía que ya no vería más entradas del otoño, pero veo que por la Sierra de Madrid, va más tardío, así que mucho mejor, ya que el otoño, es sin duda la mejor estación para disfrutar de los bosques.

    A este paso, como siga lloviendo, el próximo vadeo, lo vas a tener que hacer en Kayak, frío me da, de solo pensar en vadear el barranco, que además de bravo, tenía que bajar, con el agua bien fresquita, yo no se si me las hubiera quitado, o no, pero vamos ninguna de las dos opciones era buena.

    Salud y Montaña!!!

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    1. Aún verás alguna más Eduardo, que el otoño todavía deja rastro por aquí, aunque las nieves ya han tapado todas las cumbres.
      Tal y como va el tiempo espero que el próximo vadeo de arroyo o río de Guadarrama que me toque hacer lo haga con los esquíes puestos, que el agua estaba bien fría.
      Las encantadas cabras eran encantadoras. Encuentros muy gratos resultan.
      Salud y Montaña, compañero.

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  4. Magnífica ruta por lugares emblemáticos de Guadarrama. Maliciosa, Porrones, Pedriza, sobra decir más. Un abrazo montañero.

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    1. Una buena combinación, en verdad; y es que no hay nada mejor que salirse de los corsés y mezclar entornos. Otro abrazo para ti, Rafa.

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  5. A (o) Toño qué va, retoño qué llega y así nos allega invierno qué pela...
    Podría intuirse qué según latitud haya menos bondades, pues al hilo de conversas se recorren quebrantos, duelos y quejidos. Unos por otros, según qué orden:
    ──La que recorres,de herraduras rotas, dejando a izquierdo lado la de las cabras; a otro derecho la baja y en empinada cuesta de frente maliciosa por cansancio.
    ──Duelos por trocha toda cuesta ──qué *no pendiente, sí al final── salvo falso llano; que si tres de subida y último tramo de enfrentamiento; otros tantos de bajada, chapuzón incluido. ¿A qué corredor se le ocurre?
    ──Y de ese último que a algunos robles se parece, por lo fría, incluso casi hirviendo contrariamente a desmán ──qué no musaraña── por lugares tales tuve a bien atisbar la que entre guiones expuesta.
    Hela aquí, luego, que la retraté en cuaderno de campo; o libreta. Intimidades aparte, claro:
    [ http://2.bp.blogspot.com/-P5qB120PmYs/T3h3gIBVW8I/AAAAAAAABFA/3vC60zoDd_0/s910/musara%25C3%25B1as1.JPG ]

    ...También las tengo en cerámica.... jeje

    Pues eso...Humm, déjame pensar...¿Te llegó lo enviado?

    Salud, Libertad y Monte, por si acaso :))´

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    1. Ya van cuatro las que desde hace cuatro recorro esa cuerda desde entonces.
      El sábado anduve escalando en cabeza de Santillana, luego bajamos por entre el caos de su difusa diaclasa; y de ahí para casa.
      (Con la llegada del parque nacional se están realizando montones de actuaciones que como sabrás supone el hecho de serlo. Arreglo de trochas, letrinas en el refugio (algo que no deseaba Guzmán, y que cuando llego mi compañero Sanjuanb y P. Nicolás estuvimos hablando hace ya algo más de un año...), puentes de troncos sobre arroyos para evitar pisar los cauces (algo que me parece muy bien, en ese aspecto), máquinas de desbroce (subidas mediante helicópteros) para selección de especies y limpias, reubicación de desniveles, parapetos e instalación de normas restrictivas que por la presión que supone hay desde que está englobada ya no sólo como Parque de la Cuenca Alta del Manzanares que mediante gestión regional se sufragaba, ahora lo es a un nivel tal que su inclusión supone una publicidad mundial de tal manera que todo eso trastoca muchos planes...Tal vez, y espero que así sea, siempre para mejor aunque supone cumplir muchas cosas que nos pudieran parecer demasiado artificiosas. Otras que por su carácter no son del gusto de todos, son incluso mejores de lo que a primera vista parecen pues tratan de controlar desde su inicio lo que por costumbre podría llegar a creerse, por muchos, como tradición. Y ya sabes que después estas malas interpretaciones son difíciles de erradicar para... tor(d)os incluidos
      Cómo las cabrás, cómo habráste dado cuenta.

      Salud y Montaña, meu :))´

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    2. Hilo o Porrones, cuerda y cuestas, cabras, agua de vida, fría y tan energizante que, tras probarla, no paras de correr (y vale más que así sea), barranco, robles otoñales, también serbales, y así despedimos la coloreada estación que da paso al invierno. Salud y Montaña, querido Déicar.

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  6. ¿Cuándo merecelo?
    Siempre :)´ o eso dijo ella

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