jueves, 13 de agosto de 2015

El Gran Astazu (3.071m) desde Pineta.

Pradera y Balcón de Pineta 
El valle de Pineta y su pradera (1.320m), encajonados entre cumbres de más de tres mil metros de altitud, conforman un lugar de alta montaña absolutamente hermoso.

Cualquier excursión cuya base de salida sea la Pradera de Pineta comporta superar un desnivel muy respetable ya que las paredes Norte y Este caen a plomo sobre el valle.

Mi objetivo de hoy eran los Astazus, y digo “eran” porque al final fue sólo el Gran Astazu. No andaba yo con el ánimo pletórico.

La excursión salió maja: un desnivel positivo de 1.775m de D+, de los cuales 1.300m se suben de tirón hasta llegar al Balcón de Pineta, en apenas 4km de longitud, completando un recorrido total en torno a los 18km.

El ascenso al Balcón de Pineta consta de tres tramos principales.

El primero, o de aproximación, atraviesa un frondoso bosque de hayas, fresco y oloroso, que guarda la humedad de la noche y te la pone encima cuando lo atraviesas por la mañana.

Tras el bosque se sale a un terreno de vegetación baja, y entre helechos y bojes el camino se acerca al segundo tramo, donde ya la pendiente comienza de veras. El sendero va trazando amplias zetas, aproximándose a la gran Cascada del Cinca, para después, cuando la tiene bien cerca, hacer un giro y alejarse de ella monte arriba, a superar las distintas fajas del paredón. Se van cruzando varias cascadas secundarias, con lo que el agua no falta. La pendiente es dura y no cede. Conviene regular en función de las fuerzas de cada uno.

Cascada del Cinca
Finalmente se llega al pie de un muro que parece cerrar la salida por arriba, estamos bajo el Balcón de Pineta, en el comienzo del tercer tramo, la zona del embudo. Sí que hay salida, claro, así que con fe y perseverancia comienzo a superar las incontables y bien trazadas zetas que, finalmente, desembocan en el Balcón.

Llegando al Balcón de Pineta
Llegando al Balcón, al fondo, a la izq. el Pico de la Munia, a su dcha. el Robiñera.
Las vistas desde él compensan el esfuerzo que cuesta alcanzarlo.

El valle de Pineta, desde el Balcón
Estoy a 2.700m de altura, al pie del glaciar de la cara Norte del Perdido. 

Glaciar de la cara Norte del Perdido. A la dcha. el Cilindro
Hacia el Oeste se abre un gran plateau pedregoso que, bajo la Norte del Perdido y del Cilindro, por la izquierda, y bajo la Sur del Gran Astazú y cresta de Tucarroya, por la derecha, se extiende hasta el collado del Astazú, visible al fondo, en la distancia.

Zona árida por donde fluyen diversos cursos de agua que van directos a precipitarse por el Balcón. Aparte de los torrentes provenientes de los neveros circundantes no hay otra cosa en esta amplia zona desértica más que una gran extensión de lajas de piedra.

Me dirijo hacia el todavía no visible lago de Marboré que se encuentra al pie de la brecha de Tucarroya. El itinerario está marcado con mojones.

Alcanzo el murete de la presa del lago y lo recorro hacia el Oeste. Queda algún nevero en sus orillas.

Lago de Marboré y brecha de Tucarroya
Sigo las marcas y las trazas de senda visibles sobre la tierra. Aprieta el sol y el lugar me resulta muy poco acogedor. Tengo sed. Voy ganando altura lentamente y al rato estoy al pie del collado de Astazu.  

Decido subir primero al Gran Astazu para lo cual encaro la pedrera que finaliza en la salida del Corredor de Swan, entre el Pequeño y el Gran Astazu. Al final se empina de veras y resulta fatigosa.

La subida al Gran Astazu no es difícil y, poco a poco, salgo a la cresta y alcanzo la cima. La vista es amplísima.

El Perdido, desde la cima del Gran Astazu
Zoom sobre el glaciar del Vignemale
Desde la cima del Gran Astazu, a la izq. la Torre, después el Casco, luego la Brecha de Roland y finalmente el Taillón. En la proximidad, a la dcha. el Pequeño Astazu
Tengo mucho calor, parece que me estoy deshidratando más rápido de lo previsto, así que tomo un trago del agua que me queda, que no es mucha, y emprendo el retorno hacia la brecha de Swan.

Una vez de vuelta en la brecha contemplo la afilada arista que la separa del Pequeño Astazu, que sin ser difícil (II) es muy aérea y no admite errores, ya que el patio hacia Gavarnie es de 2.000m. Recuerdo hace unos cuantos años cuando “en familia” enlazamos ambos por la cresta, pero ahora toca encontrar agua.

El Pequeño Astazu desde la brecha de Swam
Inicio el descenso y al cabo de unos diez minutos doy con un helero en el que preparo agua y recupero las sales perdidas.

A partir de este punto voy siguiendo las trazas que me conducen de vuelta al lago de Marboré, ahora bastante concurrido, para seguir sin pausa hasta el Balcón de Pineta.

De vuelta en el lago de Marboré
Echo una mirada en derredor antes de iniciar el descenso hacia la Pradera.

Cara Norte del Perdido y Cilindro
Gran Astazu y cresta de Tucarroya
Hacia abajo, hasta el valle de Pineta
Las zetas que surcan "el embudo"
Así como por la mañana me encontré con muy pocas personas, ahora en la bajada encuentro muchas más. Las hay de todos los tipos, la mayoría van abrasados por el sol, otros se protegen con alguna gorra, y todos vamos procurando no dar un traspié inoportuno.

Poco a poco se va bajando
Con tanta afluencia es lógico cruzarse con algún "clásico"
Me reconforta ver el abrevadero que hay justo antes de que el camino se adentre en el bosque. 

El calor aprieta fuerte y la sombra es como un bálsamo.

Atrás quedan el potente desnivel, el agua precipitándose en forma de cascadas dando lugar al nacimiento del río Cinca y los chillidos de alerta de las marmotas.


Entre los árboles del bosque veo, de vez en cuando, los picachos bajo los que he deambulado y continuo la marcha para no demorar el retorno. Me esperan en Bielsa y aún hemos de volver a Zaragoza. 



15 comentarios:

  1. Pena....pena por no haberte podido acompañar. Día espléndido y caluroso por lo que se ve en las fotos! Espero que haya otra oportunidad en común;)

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    1. Excursión para y por el recuerdo. Seguro que habrá otras oportunidades; las buscaremos y en nuestra mano estará el cogerlas. Salud y montaña, brother.

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  2. Sólo una cosa hiciste mal: no subir un saco y una esterilla para pasar una noche ahí arriba viendo las estrellas. Buena excursión en cualquier caso, muy buena. Salud, montaña y ¡¡crema de sol!! jajaja


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    1. Si es que al final resulta que uno se ha dado a la molicie y, oye, que desde Bielsa, por la noche, conseguí ver alguna de las lágrimas de San Lorenzo. Crema que no falte, agua tampoco, y con salud y ánimo, a por el Palas y el Balaitous, que estaré pendiente de vuestra andanza. Un abrazo.

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  3. Ains! Pero que preciosisima es esta ruta y que buenos recuerdos me trae puesto que fué nuestro primer tresmil hace ya 10 años.... como pasa el tiempo.
    Que buen dia pillaste y menudas fotos te han quedado, como siempre.
    Un saludo montañero, aun que estemos en otras fiestas.

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    1. También fue el primer tresmil de alguien de mi entorno. Es una zona de recuerdos. El tiempo pasa volando amiga mía. De aquí a poco estaréis por allí con Isuel pegado a los talones. Ánimo con "las fiestas" y mucha salud para aguantarlas, sobre todo el mal dormir. Abrazos

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  4. Por esos lares he andado bien poco, un par de veces he intentado subir al lago de Marboré, y las dos tuvimos que retirarnos antes de tiempo. Una lastima no haber podido hacer los dos Astazus, pero mas vale una retirada a tiempo...

    Un saludo

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    1. Cuestión de prioridades. La sed pudo con el lamín de repetir lo ya hecho. De todas formas allí quedó, a la espera de los que decidamos volver a visitarlos. Las retiradas a tiempo hay que saberlas gestionar y más cuando andas por la montaña.
      Algún día ya me orientarás por la zona de Purujosa y alrededores, que pareces conocer bien.
      Un abrazo, Eduardo.

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  5. Ascender cumbres pirenaicas tomando como punto de partida valles de tanto valor natural, como atesora Pineta, aporta otra dimensión a la actividad. Mejor no mirar hacia arriba porque queda trecho por subir, pero la recompensa es suficiente para realizar el esfuerzo. Un lugar lejano de casi todo, pero cercano al “mundo de las montañas”. Y del quebrantahuesos!!! Sabia decisión atender lo primordial. Salud y Montaña

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    1. Mejor no mirar hacia arriba y concentrarse en seguir el sendero. Al final sales a la luz en un lugar remoto, en el centro de la montaña. Sí, como le digo a Eduardo, gestionar las prioridades es básico en la alta montaña. Depende mucho de ello. Salud y Montaña, compañero.

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  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  7. Buena soba sí señor. Hace la tira que no me meto esos meneos por la alta montaña; cosas de la pereza aderezadas con la edad. Bueno, aunque veo gente bastante madura en las fotos.
    El paisaje es impresionante y, por lo que veo, sois muy prudentes.

    Abrazos.

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  8. Pereza ya da, ya, sobre todo cuando ves el paredón que tienes por delante. Entonces haces la primera foto, luego agarras los bastones y comienzas a caminar. A partir de aquí el cuerpo se entona, o acata, y el resto va solo; bueno, casi ;)))
    La prudencia, o hacer caso de las sensaciones, resulta básico para deambular por estos parajes.
    Resulta gratificante encontrar en ellos a gente de todas las edades. Es señal de que la montaña acoge a todos. Un abrazo.

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  9. Gracias por la magníficas descripciones y fotografías. Deduzco que el Granm Astazu te hizo sudarlo. :-)
    Un abrazo.

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  10. Razón tienes; tanto lo sudé que casi me deshidrato, y mira que había agua por abajo y bien que me la miraba yo. En fin, cosas del verano. Un abrazo, Miguel.

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